La Familia de Broward Una herramienta útil para las necesidades de las familias hispanas
Puede llegar el día en que sus padres ya no puedan manejar sus propias responsabilidades financieras, y puede ser difícil para ellos pedir ayuda, incluso si la necesitan. Pero con un enfoque sensible, puedes trabajar con tus padres gradualmente y hacer que el proceso sea lo más cómodo posible. Aquí hay ocho pasos para asumir la administración de las finanzas de sus padres.
1 – Comience la conversación temprano
Puede pasar algún tiempo antes de que tus padres necesiten tu ayuda, pero comienza a hablar ahora. Por ejemplo, considera hablar con tus padres sobre quién manejará sus asuntos si surgen problemas. El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento recomienda que los padres den su consentimiento previo por escrito a un miembro de la familia designado para que esa persona pueda hablar sobre los asuntos personales de los padres con profesionales clave, como médicos, representantes financieros y funcionarios de Medicare. Sin este tipo de planificación previa, las leyes de privacidad pueden impedir conversaciones importantes.
Comenzar un diálogo continuo ahora le facilitará la comprensión de su panorama financiero y le dará una mejor comprensión de cuál puede ser su nivel de participación con el tiempo.
2 – Haz cambios graduales si es posible
En lugar de arrasar para hacerse cargo de las finanzas de sus padres, aumente su apoyo poco a poco si es
necesario y cuando sea necesario. Por ejemplo, si ha asumido la responsabilidad de escribir cheques, comiencen haciéndolo juntos. Este tipo de enfoque gradual y sensible les da a ellos (ya usted) algo de tiempo para sentirse cómodo con los nuevos arreglos.
3 – Hacer un inventario de los documentos financieros y legales.
Haga una lista de los contactos de sus padres, números de cuenta y los lugares donde almacenan documentos legales como actas de nacimiento, pólizas de seguro, escrituras y testamentos. Vuelva a verificar que todo siga siendo válido y actualizado, y que todas las cuentas estén al día. Ya sea que esté compilando esta información o tomando nota de dónde la han almacenado sus padres, asegúrese de que cualquier información confidencial esté en un lugar seguro .
4 – Simplifique las facturas y asuma las tareas financieras
Una vez que todo esté organizado, eche un vistazo más de cerca a los ingresos que puedan tener sus padres, como jubilación o ahorros, y cambie esos flujos de ingresos a depósito directo si es posible. Esto asegurará que el dinero de sus padres aún llegue a sus cuentas, incluso si surge un problema en el que no pueden (u olvidan) hacer un depósito. Si pagar las facturas es estresante para ellos, puede considerar configurar el pago de facturas en línea para que las cosas se paguen automáticamente cada mes.
5 – Considere un poder notarial
Un poder notarial es un documento, firmado por un adulto competente, que otorga a otra persona el poder de tomar decisiones en su nombre. Hay varios tipos de poder notarial, que cubren decisiones financieras, médicas o generales, y pueden diseñarse para ser temporales, limitados a circunstancias específicas o más completos. Ejecutar un poder notarial con sus padres le asegura que tiene la autoridad legal para tomar decisiones importantes cuando sus padres no pueden hacerlo. Comuníquese con un abogado especializado en derecho de personas mayores para que lo ayude a redactar un poder notarial que se ajuste a sus necesidades.
6 – Comunique y documente sus movimientos
Mantén informados a tus seres queridos sobre lo que sucede, especialmente a tus hermanos, tanto tuyos como de tus padres. Los familiares pueden ser importantes fuentes de apoyo y las líneas abiertas de comunicación pueden reducir el riesgo de malentendidos. Administrar las finanzas de sus padres ancianos puede ser mucho trabajo, pero no necesariamente tiene que hacerlo todo solo.
7 – Mantén tus finanzas separadas
No es una buena idea mezclar tus finanzas con las de tus padres, incluso si parece una solución conveniente. Usar tu propio dinero para ayudar a tus padres puede ser una pendiente resbaladiza, y siempre debes mantener separados tus bienes y fondos personales. Es importante que no ponga en
peligro su propia jubilación o sus metas de ahorro mientras trabaja para ayudar a sus padres.
8 – Conoce los signos
Si ha hablado con sus padres con anticipación, es probable que tenga un plan establecido sobre cómo ayudarlos cuando lo necesiten. Pero saber cuándo es apropiado, o necesario, que participe puede ser un desafío. Estos signos pueden ser una pista.
Compras inusuales: preste atención si sus padres de repente compran cosas que no se ajustan a sus necesidades o estilo de vida, o si comienzan a participar en múltiples concursos o sorteos. Este comportamiento puede salirse de control rápidamente y las personas mayores suelen ser vulnerables a las estafas.
Montones de correo sin abrir: un montón de correo puede ser una señal de que tus padres están haciendo compras inusuales, atrasándose en el pago de las facturas o participando en sorteos.
Quejarse siempre por el dinero: desde afirmar que no tienen suficiente dinero hasta evitar actividades que creen que podrían perjudicarlos, si tus padres solo hablan de dinero cuando estás con ellos, podría ser una señal de que hay un problema.
Contratiempos físicos: La pérdida de visión puede hacer que sea difícil conducir hasta el banco, y la artritis puede convertir la emisión de cheques o el envío de sobres en una tarea dolorosa. Si cree que las actividades se están volviendo desafiantes, puede ser una señal de que necesitan ayuda.
Problemas de memoria: los descansos cognitivos, desde no saber qué fecha poner en un cheque hasta no recordar dónde escribir el monto en dólares, pueden ser un indicador importante de que es posible que necesite intervenir y ayudar.
Si ha iniciado la conversación temprano, sabrá qué hacer cuando surjan estas señales. Si necesita ayuda, hay varios recursos disponibles, incluido el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento y la Alianza Nacional para el Cuidado .
De Miguel Rivera, Bank of America
