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El defensa del Barcelona Eric García (i) celebra con sus compañeros tras anotar el primer gol del equipo frente al Vissel Kobe. BUDDHIKA WEERASINGHE / EFE. Foto cortesía. Foto crédito portada:Yahoo Sports.
Por Vincenzo De Iulio *
El FC Barcelona inicia esta nueva temporada con un único objetivo: volver a conquistar la orejona. Tras años de irregularidades en Europa, incluso jugando la Europa League, el club parece haber encontrado el rumbo de la mano de Hansi Flick. La temporada pasada fue un renacer a medias: fútbol ofensivo, jóvenes en plena explosión y una eliminación europea que dolió, pero que dejó la sensación de que este equipo está cerca de volver a la grandeza.
La figura de Flick ha sido clave. Desde su arribo, el equipo ha ganado intensidad, dinamismo y verticalidad. El Barça pasó de un ritmo plano a una propuesta agresiva, con presión alta, transiciones rápidas y muchos goles a favor. “Vamos a trabajar mucho. Vimos un equipo con calidad, hambre, buena actitud y una gran mentalidad. Vimos que había mucho potencial y trabajamos duro a partir de ahí. Creo que hicimos muchas cosas de modo correcto”, declaró el entrenador alemán en el mes de junio para el canal oficial del club. Y los números lo respaldan: 174 goles a favor en la temporada pasada, convirtiéndose en el cuadro con mayor número de goles convertidos en la última temporada.
Sin embargo, las grietas de los blaugranas se vieron en el tramo final de las competiciones. Encajó muchos goles en los últimos minutos de los partidos, como sucedió con Inter en Champions o en la final de la Copa del Rey frente al Real Madrid. Las lesiones fueron otra de las pesadillas que vivió Flick en jugadores claves como Balde, Koundé, Gavi, Casadó. Esa fragilidad en defensa y la propensión de los jugadores a las lesiones fueron determinantes para no llegar a la ansiada final de la Liga de Campeones.
El reto ahora es corregir esos errores en la pretemporada. Hansi Flick busca mayor solidez en la zona defensiva, mayor concentración y gestión física rigurosa. La calidad está. El carácter también. Y por primera vez desde la salida de Leo Messi, el Fútbol Club Barcelona arranca otra temporada sin incertidumbres ni reconstrucciones: hay un proyecto, se ve una identidad y hay hambre en los jóvenes y los veteranos de la plantilla.
Europa lo sabe: el Barça está de vuelta y va en busca de la gloria eterna.
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