Lo que un día fue una fantasía, hoy se convierte en un trabajo de familia. La lucha constante de esta mujer, la llevó alcanzar el éxito
Se necesita mucho valor y persistencia para emprender y mucho más si se es madre.
Pero para la peruana Paola Díaz, esposa, madre y dueña del salón de belleza Lollipop desde hace tres años, es un sueño por el que vale la pena luchar.
Una empresa familiar, ubicada estratégicamente en Davie, Florida, local que se divide en cuatro secciones.
Durante la entrevista Paola nos relató que, es un family salón que tiene que ver con cortes de cabello para toda la familia, corte por primera vez para niños, peinados, spa para niña manicure y pedicure, foto estudio (bajo cita) y el playground que pueden usar los niños pagando una pequeña tarifa y quedarse el tiempo que quieran.
“Estamos abiertos siete días a la semana” dice con entusiasmo la propietaria que emigró hace 12 años de Perú.
– ¿Fue fácil ser empresaria? ¿Qué actividad realizabas antes?
-Trabajaba en una empresa de una persona peruana vendían partes de aviones.
Me costó mucho ser mamá me fui hacer muchos tratamientos para tener a Luca, al lograr ser mamá quise tener un negocio para la familia y sale el tema de lollipop, negocio que existe desde hace muchos años. Desde el 2004, compramos el negocio.
¿Qué es lo que más te ha ayudado y qué ha sido lo más desafiante?
Uno no puede bajar la guardia, hay que estar físicamente en el negocio, confiar en la gente, recibir el respaldo de tus empleados. Uno puede ir a venderlo a todos lados, pero el servicio lo es todo.
Queremos que la persona que pisa lollipop se sienta como en casa, por el servicio que le damos y la atención para ellos, todo parte de la constancia todos los días.
¿Cómo haces para tener un balance entre ser mamá y empresaria?
Mi familia es lo más importante, puedo decir que ahora después de dos años puedo tener un poco más de tiempo, pero Luca y mi esposo Miguel son todo, así que siempre hay espacios para ellos.
Claro hay momentos que debo trabajar y ¡mi hijo armar rompecabezas!
Luca es parte de Lollipop, viene los fines de semana me ayuda, está atento con los clientes.
¿Qué aconsejarías a las mujeres y madres que quieren emprender un negocio?
Al comienzo no es fácil, es estar constantemente en la lucha de conseguir más clientes y darle un mejor servicio, hay que hacer el tiempo para lograr nuestros sueños.
Esto es un comienzo para mí, la idea es poder franquiciar Lollipop y seguir adelante y ayudarnos entre todos.
Pueden seguir al salón Lollipop en las redes: @lollipopopad
@lollipopsalon