Crisis de la Unión Europea: sin soluciones y sumida en la incertidumbre

Caminar por algunas ciudades europeas no es lo mismo que hace tan solo unos años. Mujeres con niños en brazos pidiendo limosna, mendigos tratando de encontrar un sitio donde pasar la noche, inmigrantes que suben a los metros a cantar una canción a cambio de una moneda, carteristas aprovechando la oportunidad para asaltar a los turistas….estas imágenes solo refuerzan lo que todo el mundo sabe: el viejo continente está sumido en una grave crisis económica que además tiene profundos efectos sociales.

Pablo Bortz, economista argentino, quien posee un doctorado de la Universidad tecnológica de Delph, Holanda, lo confirma en una entrevista telefónica con LFDB. Los ajustes fiscales hechos por gobiernos de varios países, los cambios en la legislación como por ejemplo la edad de jubilación, las políticas de contratos temporales, la facilitación en el tema de despidos y demás “soluciones” para tratar de frenar la crisis, tan solo contribuyen a la descomposición social.

Cambios sin efectos

A pesar de los esfuerzos que países como España, Grecia e Italia están haciendo en medida de recortes y ajustes, pareciera que éstos no tienen el efecto deseado. ¿Por qué sucede esto? Bortz asegura que implementan las políticas pero no sirven: “como que no entienden o no les interesa algo básico y es que se va a seguir profundizando la crisis, con más recortes la economía va a seguir cayendo, las recaudaciones impositivas caerán, las deudas van a pesar y valdrán más en término de Producto Interno Bruto (PIB), por eso el panorama va para peor”.

Al preguntarle por temas más específicos, como el nuevo pacto fiscal para fijar un techo en el gasto público de los países de la UE, que supone un refuerzo en la disciplina fiscal y sanciones a los que incumplan, Bortz es aún más enfático: “La responsabilidad de Alemania de la crisis es de un 95%; la hipocresía que tiene es enorme, pues ese país y Francia fueron los primeros que incumplieron los criterios que estableció el tratado de Maastricht, y luego fueron seguidos por muchas naciones. A mi juicio la crisis no surgió por ese incumplimiento, pero no quita que los primeros y originales países que quebrantaron lo que ellos mismos impulsaban fueron Alemania y Francia.

El tratado dice que el déficit fiscal no puede superar el 3% anual del PBI y el total de la deuda pública no puede superar el 60%. Lo que quieren hacer es reforzar eso, hacerlo más estricto y llevar ese 3% a un 0.5%, pero lo más probable es que los países lo incumplan. Hay muchas cosas en el aire y la dirección en la que impulsan estas iniciativas es pésima”.

Bortz también da su mirada crítica sobre otro de los anuncios, en este caso el Mecanismo Europeo de Estabilidad (Mede) que será el reemplazo del actual Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (Feef) y asegura que no tiene ningún valor agregado: “por un lado van a implementar nuevas reglas que son más estrictas que el tratado de Maastricht (que ya era malo de por sí) y por el otro lado no son específicos en cuanto al financiamiento que le pueden dar a los países. En síntesis, no cambia mucho la situación”.

Futuro de Europa

¿Y bajo ese panorama, hay soluciones para  salir de la crisis? ¿A dónde va Europa? “Soluciones reales hay, unas menos dolorosas, otras menos rápidas. Lo malo del euro son las reglas que lo gobiernan. No hay corrección de desbalances, pues por ejemplo Alemania exporta más a la zona del euro que lo que importa de ella. Esto le crea al comprador un problema de deuda, porque adquiere más de lo que vende y tiene que endeudarse para pagar esa obligación, con altas tasas de interés. A muchos países les conviene irse del euro. Grecia se va a ir del euro y no va a poder pagar la deuda, no sabría si Portugal e Irlanda en un futuro. España continuará con sus problemas financieros y si las circunstancias continúan así, le convendría salirse del euro. La deuda de Italia es impagable y a mediano plazo creo que hasta podría entrar en ‘default’. Yo digo que es mejor para algunos países retirarse aunque esto les cause problemas a corto plazo, pero luego podrán salir de la recesión”.

Estados Unidos sí, América Latina no

Si se mira hacia América, tampoco es un secreto que la economía de Estados Unidos está en un momento delicado, con una lenta recuperación. ¿Cuál es el verdadero impacto de la crisis europea sobre este país?  “Los bancos van a perder mucha plata y no me extrañaría que fuercen de vuelta un rescate de estas entidades si un par de países se van del euro. Si cae Europa, el dólar sube a las nubes, será la única moneda para ahorrar y esto lo hará encarecer y probablemente caigan las exportaciones de Estados Unidos al viejo continente. El segundo problema son los seguros contra default; si Grecia no paga su deuda, el tenedor del seguro puede pedir al asegurador que pague lo pactado. Estados Unidos emitió muchas pólizas. El tercer problema que puede haber es que muchos préstamos interbancarios usan de garantías bonos de deuda y si las obligaciones de países como Italia caen, esos bonos ya no serán tan seguros como garantías, por lo que nadie va a prestar porque nadie sabe que tiene el otro. Todos estos factores generan perdidas a los bancos”, explica el economista.

En cuanto al impacto de la crisis en América Latina, Bortz asegura que no será tan fuerte: “A América Latina le afecta más lo que pase en China que en Europa, pero esto no implica que salga bien librada. La crisis de países como Grecia y España en cierto modo es similar a las crisis  latinoamericanas de los 80 y 90. Hoy en día hay más oportunidades en América Latina que en Europa y muchos españoles están yendo a Argentina y portugueses a Brasil por ejemplo. Al menos a mediano plazo hay más potencial en Latinoamérica que en Europa”.

¿Desaparece el euro?

Después de esta entrevista, es inevitable preguntarle al economista si el Euro desaparecerá y el sueño de la integración europea morirá. Él asegura que es algo difícil de pronosticar, pero sí cree que se llegará a un euro más reducido. Además cree que los países que se vayan del euro van a estar mucho mejor. “Yo viví la crisis argentina y en muchos aspectos es similar. Cuando Argentina entró en default y salió de la convertibilidad de paridad con el dólar le fue mejor. Creo que bien ejecutado es seguro que Grecia puede mejorar, lo mismo Irlanda. Francia, España e Italia se van a estancar y si no se da un cambio de raíz se verán obligados a hacer alguna restructuración de deuda, por lo que el panorama va de mal en peor. Que desaparezca el euro es una posibilidad, no la descarto”, finaliza Bortz.