Por Isaac Cohen*
La reciente turbulencia e incertidumbre prevalecientes en la economía estadounidense se ven diferentes desde adentro o desde afuera del gobierno. Por ejemplo, el indicador reciente que la economía se contrajo 0,3 por ciento en el primer trimestre de este año se atribuye al estilo de adoptar decisiones erráticas e impredecibles sobre aranceles y negociaciones comerciales, hasta ahora aplicado por la Casa Blanca. Hasta indicadores positivos, tales como la creación de 177.000 nuevos empleos en abril, con el desempleo igual en 4,2 por ciento, son rechazados como irrelevantes, porque aún no incluyen los efectos que la imposición de aranceles contra las importaciones del mundo entero tendrá sobre más inflación y menos crecimiento económico.
En contraste, el secretario del Tesoro Scott Bessent, en una columna de opinión en el Wall Street Journal (05|05|25), argumenta que “los críticos de la agenda económica de Trump atacan aisladamente las políticas individuales”, porque los aranceles arancelarios solo son un componente de una política de tres pasos, “para abrirle la puerta a la década más próspera de la historia americana”. Los aranceles, dice el secretario Bessent, son una herramienta efectiva para reequilibrar el comercio internacional, forzando a los demás a reducir las barreras comerciales, mientras que retonan las inversiones y los empleos. Los otros dos componentes del trípode son primero, volver permanentes las rebajas de impuestos aprobadas durante el primer mandato del presidente Trump, incluyendo otras promesas de campaña, cuentos como no gravar las propinas, los salarios extraordinarios, o la seguridad social. Finalmente, el tercer componente es “una ambiciosa agenda de desregulación”, la cual contribuirá, por ejemplo, a reducir la deuda pública y establecer “la dominación energética”.
Continuará.
*Analista y consultor internacional, exdirector de la Oficina de la CEPAL en Washington. Comentarista de economía y finanzas de CNN en Español TV y radio, UNIVISION, TELEMUNDO y otros medios.
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Por Isaac Cohen*
La reciente turbulencia e incertidumbre que prevalece en la economía estadounidense se percibe de forma diferente desde dentro y desde fuera del gobierno. Por ejemplo, el reciente indicador de que la economía se contrajo un 0,3 % en el primer trimestre de este año se atribuye al estilo errático e impredecible de toma de decisiones sobre aranceles y negociaciones comerciales, aplicado hasta ahora por la Casa Blanca. Incluso indicadores positivos, como la creación de 177 000 nuevos empleos en abril, con una tasa de desempleo que se mantiene en el 4,2 %, se descartan por irrelevantes, ya que no incluyen los efectos que la imposición de aranceles a las importaciones de todo el mundo tendrá en una mayor inflación y un menor crecimiento económico.
Por el contrario, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, en un artículo de opinión publicado en el Wall Street Journal (25/05/05), argumenta que «los críticos de la agenda económica de Trump atacan las políticas individuales de forma aislada», porque la política arancelaria es un componente de una política de tres pasos «para marcar el comienzo de la década más próspera de la historia estadounidense». Los aranceles, afirma el secretario Bessent, son una herramienta eficaz para reequilibrar el comercio internacional, al obligar a otros a reducir las barreras comerciales, al tiempo que recuperan las inversiones y los empleos. Los otros dos componentes del trípode son, en primer lugar, hacer permanentes las reducciones de impuestos aprobadas durante el primer mandato del presidente Trump, junto con otras promesas de campaña como la eliminación de los impuestos sobre las propinas, las horas extra y la seguridad social. Por último, el tercer componente es una «ambiciosa agenda de desregulación» que contribuirá, por ejemplo, a reducir la deuda nacional y a establecer un «dominio energético».
Continuará.
*Analista y consultor internacional, exdirector de la CEPAL en Washington. Comentarista sobre temas económicos y financieros para CNN en Español, Univisión, Telemundo y otros medios.