Daniela Maria Augello, es psicóloga de la escuela de la gestalt y psicoterapeuta, ha publicado el libro “Reconstruir a partir del amor. Cómo gestionar los cambios en la vida de pareja” el cual trata sobre la protección y cuidado del amor de pareja a medida que pasan los años y suceden cambios inevitables.
Este librito, explica lo que puede suceder después de la fase inicial de enamoramiento, cuando llegan los hijos, las rutinas, cuando desaparecen algunos impulsos de la juventud.
Compartimos aquí 9 párrafos del libro que pueden ayudar a crecer y prevenir a muchos matrimonios.
- Hombre y mujer son distintos: eso nos impulsa a abrirnos
El psicoterapeuta Giovanni Salonia, propone un fascinante viaje hacia el descubrimiento de las diferencias entre sexos. Ser hombre y ser mujer nos obliga y nos da la posibilidad de experimentar toda la riqueza del intercambio y del diálogo.
- Amar requiere conocer los defectos del otro… y saber vivir con ellos
Amar no significa ignorar los defectos del otro, sino conocerlos y saber que podemos tolerarlos. Significa ser conscientes de que, más allá de unos comportamientos distintos de los nuestros, es posible el encuentro.
- Las relaciones “provisionales” no funcionan: se eligen peores parejas
La idea general de que “la cosa va bien mientras funciona, y luego ya se verá” perjudica la voluntad de la persona, que desde el principio ya está perdiendo. Lo ideal no es vivir con el otro y tener las maletas preparadas al lado de la puerta: así se transmite cierta sensación de inestabilidad y desconfianza.
- Con los años, somos toscos con nuestra pareja y obsequiosos con los “de fuera”
Dentro de la pareja pasamos por alto el dar las gracias, el pedir disculpas y cierta formalidad que podría subsistir en la pareja cual amable y benévola costumbre. Estas carencias crean un vacío, y puede que influyan en que busquemos experiencias extraconyugales, que en cierta medida hacen que volvamos a sentir la emoción de sentirnos cortejados y queridos. Sin duda, es triste lo que ocurre en esos casos.
- La pasión no es para siempre, el amor no se mantiene solo
Las parejas que esperan que la pasión dure para siempre o que la intimidad no se vea nunca amenazada, ya han preparado el camino hacia la desilusión. La teoría nos lleva a entender que nunca debemos cansarnos de comprender, de construir y reconstruir nuestra relación amorosa.
- El afecto y el sexo requieren darle prioridad: busquemos momentos
Si la relación de pareja es prioritaria, hay que cuidarla renunciando a alguna otra cosa. Si la pareja no logra hallar tiempo para estar juntos, si las atenciones disminuyen, toda la dimensión de la corporeidad se resiente, lo cual afecta a la sexualidad, la afectividad y el apego.
- La pareja cambia y está en movimiento: eso debe fortalecer el amor
Es hermosa la lección del Cantar de los Cantares, donde ella y él están siempre en movimiento. Después de encontrarse, se pierden de nuevo, para que nunca puedan pararse y decir: estamos a resguardo.
- Habrá momentos de apatía: combátelos con intereses comunes
Un momento inicial de apatía -que sin duda todas las parejas experimentan antes o después-, si no se le presta atención y se afronta, puede elevarse al grado dos, tres, seis, diez… y convertirse en un vacío imposible de colmar
- Ni rigidez ni estancamiento: deja entrar a tu cónyuge
Habrá muchas veces en que cometeremos errores, y en otras ocasiones sentiremos desgana; no estaremos exentos de sufrimiento de vez en cuando nos veremos compensados por alegrías; nos perderemos y nos volveremos a encontrar.
Fuente: La Familia. info